El venezolano Maickel Malamed, que sufre de atrofia muscular, cruzó la meta del Maratón de Chicago en 16 horas y 46 minutos después de haber largado junto a 40,000 fondistas en una de las pruebas más rápidas del mundo.
Malamed, según informaron los organizadores, partió a las 8:20 de la mañana del domingo y cruzó la línea de llegada poco después de la 1 de la madrugada, después de caminar las 26.3 millas del recorrido por 29 vecindarios de la ciudad.
En la llegada se encontraba un pequeño grupo de personas, entre ellas su padre, a quien éste le entregó la medalla que recibió como premio por haber competido.
Los sueños se pueden concretar, declaró a los periodistas, según lo publicado en la página en internet del maratón.
La vida es lo más maravilloso que le puede suceder a uno, y es por eso que hay que aprovecharla al máximo, agregó.
Malamed, de 38 años, nació con atrofia muscular después de un duro y complicado trabajo de parto porque su cordón umbilical venía rodeando su cuello asfixiándolo, dejando su cuerpo sin movimiento, explica en su página.
Pero, a pesar de sus debilidades físicas se propuso participar en los cinco grandes maratones del mundo para llevar un mensaje de esperanza y superación.
Chicago fue su tercera prueba después de Nueva York y Berlín, y en su calendario todavía quedan Tokio y Boston.
Jeremy Borling, vocero del Maratón de Chicago, dijo a los periodistas que el tiempo oficial de Malamed no fue registrado porque los cronómetros ya no funcionaban en el momento de su llegada; pero, obviamente, nadie puede dejar de reconocer su esfuerzo, explicó.
El podio de la prueba fue encabezado por el keniano Dennis Kimetto, quien completó el trayecto en 2 horas, 3 minutos y 45 segundos, seguido de sus compatriotas Emmanuel Mutai y Sammy Kitwara.
En la categoría femenina, Rita Jeptoo, también de Kenia, ocupó el primer lugar con un tiempo de 2 horas, 17 minutos y 18 segundos.
MCH