Una vez más el delantero de la selección de Uruguay, Luis Suárez, se ganó los reflectores y no fue por hacer goles, sino más bien por volver a agredir a un futbolista con una mordida. Esta vez, su víctima fue el italiano, Giorgio Chiellini, y por tal motivo, el charrúa otra vez ha sido blanco de burlas a través de las redes sociales.