Una hora y 23 minutos, fue el tiempo que le bastó al serbio para convertirse en el primer tenista en ganar dos veces consecutivas este torneo, confirmando así, que es el número uno del mundo.
El desempeño del tenista serbio en el partido decisivo fue contundente, y sólo hubo incertidumbre en el primer set, cuando tuvo que llamar al físico por un problema en el sóleo (pantorrilla) derecho, que un masaje resolvió para que pudiera continuar.
El segundo se desarrolló sin sorpresas, con un 3-0 a favor del serbio con un servicio arriba, y aunque Milos Raonic se acercó, Djokovic supo conservar la ventaja que le daría el título por 6-2 y 6-3.
Por su parte, para Milos Raonic no todo es malo, ya que tuvo un gran torneo en el que fue considerado la revelación, además que en unos días se convertirá en el primer canadiense que dispute el Masters de Londres.
Con este triunfo, Djokovic sumó su victoria número 600, su vigésimo Masters 1.000, y su sexto título del año, luego de haber conseguido Wimbledon, Indian Wells, Miami, Roma y Pekín.
Cabe señalar que el ahora Master de París no perdió ni un solo set en todo el torneo, reafirmando que es uno de los mejores en el tenis bajo techo, donde no ha perdido en dos años.
Este es un paso más en la carrera de Novak Djokovic para terminar el año como primer lugar del ranking mundial por tercera ocasión, y para ello, únicamente le bastará ganar tres partidos en el Master de Londres para asegurar terminar en la cima de la clasificación por encima de su más cercano perseguidor, Roger Federer.
