El intentar engañar al árbitro es una de las acciones más controvertidas de la escena del fútbol, cuando debería ser una de las más penadas por faltar al código de ética del Fair Play (Juego Limpio) y al tratarse de profesionales, los cuales son un ejemplo para las nuevas generaciones.
Es por todos conocido que futbolistas de todo el mundo exageran ciertas jugadas con el fin de llamar la atención del árbitro y sacar provecho de alguna falta o jugada.
Incluso hay jugadores que son reconocidos por sus artes histriónicas. Marcelo, Sergio Busquets o Neymar son sólo algunos de los nombres que sobresalen en la lista de los mejores clavadistas del fútbol.
Para los mexicanos, el nombre de Arjen Robben es sinónimo del máximo tramposo y clavadista de los últimos años debido a lo ocurrido en la Copa Mundial de Brasil 2014.
Recientemente el mundo del fútbol se sorprendió con la llegada de un nuevo actor, digno de algún premio de la academia.
Su nombre es Benjamin Siegert, mediocampista del equipo de la tercera división alemana Preußen Münster, quien en un partido en contra del Sonnenhof Großaspach decidió saltar a la piscina en dos ocasiones en la misma "falta" con tal de conseguir un penal a favor de su equipo.
Aquí les dejamos el "dramático" video del clavado de este futbolista.
58 días después del partido entre México y Países Bajos... #NoEraPenal