La selección mexicana, que se clasificó de rebote a la repesca de la eliminatoria mundialista para Brasil 2014, regresó hoy a su país con la mayoría de los jugadores con la cabeza baja, tras perder 2-1 ante Costa Rica.
México cayó ante los costarricenses luego de ser dominado en la última parte del encuentro, consecuencia de lo cual estuvo a punto de ser eliminado del Mundial, pero Estados Unidos derrotó a Panamá 2-3 con par de goles de última hora y el "tri" puso mantenerse en cuarto lugar y asegurar su pase al repechaje.
Liderados por el entrenador Víctor Manuel Vucetich, quien antes del partido criticó la actitud arrogante de los jugadores en algunos momentos de la eliminatoria, regresaron a casa los mexicanos que juegan en la liga.
Casi todos mostraron caras largas, luego del revés, a pesar del cual México se mantuvo "vivo" en su afán de llegar al Mundial, de manera "inmerecida", según la opinión de los medios locales.
"Hay que trabajar y levantar la cara. Estamos muy avergonzados", escribió en su cuenta de twitter el centrocampista Fernando Arce poco después de llegar a México.
El delantero Javier Hernández, del Manchester United inglés, el portero Guillermo Ochoa, del Ajaccio francés, y los centrocampistas Giovanni Dos Santos y Javier Aquino, del Villarreal español, viajaron desde San José hacia sus países de residencia.
La selección volverá a concentrarse el 27 de octubre para partir horas después a San Diego, donde enfrentará a Finlandia en un partido amistoso, previo a los duelos de ida y vuelta frente a Nueva Zelanda, por un boleto para Brasil 2014.
México recibirá a los neocelandeses el próximo 13 de noviembre y devolverá la visita a Wellington el 20 (horario mexicano) para decir cual de los dos gana el derecho de asistir al Mundial.