El Estadio Omnilife es un claro ejemplo de la explotación que vive el fútbol azteca
Mucho se ha hablado en fechas recientes sobre el nivel que tiene el fútbol mexicano, recalcándose tras terrible fracaso por el que la Selección Mexicana accedió a la copa mundial, y es que hay que ser sinceros, se fracasó, y el proyecto de selección nacional se vio beneficiado del carácter de lucha y entrega del archirrival estadounidense quien nos regaló el pase al repechaje, y bueno todos conocemos el desenlace de esta historia.
Sin embargo, no podemos ocultar y callar este tema, mas, teniendo enfrente el Mundial de Brasil, en el que no podemos esperar un gran el papel de la selección mexicana y debemos aceptar el hecho de que llegamos de rebote y nuestras expectativas deberían estar en la esperanza de ver máxima entrega y realizar un trabajo decoroso, nada más.
Pero bueno, el tema de la selección mexicana lo tocaremos en otro momento, el tema en este momento es la Liga MX y sus alrededores; Y si vamos a hablar y armar un debate al respecto, hay que dejar en claro que el Fútbol Mexicano es actualmente una liga mediocre y con un rendimiento justamente precario, en donde directivos se preocupan más por el bien de su cartera, que por el presente y futuro futbolístico de su institución, y habrá que aceptar que hablando de negocios están en lo correcto, hasta cierto punto.
LA REALIDAD
Existen ejemplos como Chivas que tiene una infraestructura impresionante detrás, estadio relativamente nuevo, económicamente una de las franquicias más poderosas e influyentes de Latinoamérica, han "invertido" en jugadores "clave", directivos, entrenadores, sin embargo lleva varias temporadas en un profundo bache deportivo que lo tiene cerca de la pelea por el descenso.
Caso similar el que se vive en Tigres, Monterrey, Pumas, incluso el América ha vivido lo mismo, a mayor o menor escala, en las últimas temporadas.
LA OTRA CARA DE LA MONEDA
También existe la contraparte, equipos y directivas como Tolúca, León o Santos que apuestan por un modelo de continuidad, con directivas preocupadas y ocupadas en lo futbolístico y el desarrollo personal y profesional de sus jugadores, manteniendo una base de experiencia y contrataciones certeras, aunado a un trabajo de cantera y preparación de nuevos talentos que da resultados.
También hay que subrayar lo hecho por jugadores, quienes sobreponen el amor al juego, la entrega y son esa cereza en el pastel en algunos casos, en otros son la luz al final del camino. Casos como el del chileno Humberto Suazo o los mexicanos Raúl Jiménez, Carlos Fierro, Alan Pulido, Arturo González, Isaac Brizuala, entre otros, siendo estos últimos los ejemplos de jugadores jóvenes todo corazón, que pese a la juventud de sus piernas, marcan diferencia con su entregano sólo en sus plantillas, sino también en la Liga, y nos recuerdan que talento hay, sin embargo falta una guía y una trabajo institucional o un programa que los lleve a desarrollar su lucidez deportiva a buen término.
El cambio radical que todos pudimos ver en Marco Fabián trás su llegada al Cruz Azul es un ejemplo claro de lo que hablo.
Pero no hay que cegarnos por 5 minutos de grandes resultados o partidos de entrega, estos jóvenes son hasta el momento futuras promesas que sin duda alguna podrían dar ese pequeño brinco de calidad que falta entre conquistar torneos de categorías menores a desarrollar un gran papel a nivel internacional y poner el nombre de México en los más altos a nivel profesional.
Sin embargo, para que esto pase tendría que haber una reestructuración interna en los equipos, en donde el beneficiado sea el jugador, en donde se piense a futuro y no en las carteras de las instituciones o de los manejadores.
Estén convencidos que si se lograse ese pequeño cambio el beneficiado será nuestro fútbol y la calidad del mismo, posiblemente no a corto, pero sí a mediano y largo plazo.
EL CAMBIO A SEGUIR
Basta con encender la televisión y ver el fútbol Alemán o el Español, es más, habrá que reconocer el proyecto de fútbol que realizaron nuestros vecinos del norte, Estados Unidos, quienes pasaron de ser un país "neófito" en el deporte y, utilizando la infraestructura de organizar una Copa Mundial, lograron generar pasión y atracción por el deporte, hoy 20 años después son una de las 4 selecciones más poderosas del continente, con un proyecto de trabajo que importa y exporta jugadores a ligas europeas, dándole calidad a su liga y sobre todo a su selección, en donde el trabajo psicológico es una de sus principales armas.
La respuesta está a la vista, no hay que descubrir el hilo negro, simplemente hay que dejar 5 minutos fuera el interés propio inmediato y pensar en el bien de la Liga, fuera Liguillas, que si bien aumentan el nivel y la expectativa durante 3 semanas, no deja de ser un salvavidas para las malas entradas y el bajo nivel en los partidos cada fin de semana, incluso en los llamados "Clásicos".
Si se realiza un trabajo bien planeado, en donde la continuidad, sociedad y entrega entre jugadores, clubes, directivos, representantes y federación sea la base, los resultados deportivos, sociales y económicos serán aún mayores que las "teóricas perdidas" que el inicio de esta reestructuración causarían.
Dejemos de tenerle miedo al cambio, el ya merito está a unos pasos de quedar atrás, sólo es cuestión de dar el primer paso y empezar a caminar en la dirección correcta.
