El español David Ferrer, cuarto favorito, ganó con solvencia al chipriota Marcos Baghdatis (6-4, 6-2 y 6-3) y alcanzó los octavos de final del Abierto de Australia, primer Grand Slam de la temporada.
Ferrer, que superó la tercera ronda en menos de dos horas, no dio opción al chipriota, muy lejos del nivel que mostró en el 2006, cuando fue finalista en el Melbourne Park y apuntaba a uno de los grandes animadores del circuito.
Baghdatis, estancado finalmente en un segundo plano incapaz de rentabilizar su talento, rehuyó del cuerpo a cuerpo al que le invitó el español, firme aspirante a animador del tramo final de la competición.
David Ferrer se enfrentará en octavos al japonés Kei Nishikori, su verdugo en los Juegos Olímpicos de Londres, que ganó al ruso Evgeny Donskoy por 7-6(3), 6-2 y 6-3.
Ferrer y Nicolás Almagro, que superó al polaco Jerzy Janowicz (7-6(3), 7-6(4) y 6-1), son los únicos supervivientes españoles en el cuadro masculino, del que cayó Fernando Verdasco, superado en cinco sets por el sudafricano Kevin Anderson (4-6, 6-3, 4-6, 7-6(4) y 6-2).
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