Carlos Tévez, el jugador del pueblo

El futbolista argentino cumple 31 años de edad y es un auténtico reflejo de superación personal; la infancia del atacante de la Juventus no es uno de sus mejores recuerdos.

05-Feb-2015 QuimiNet Fútbol Internacional
VLD ART - FutInternacional
 

Un día como hoy pero hace 31 años llegó al mundo Carlos Tévez, futbolista argentino que se ha convertido en uno de los más destacados no solo en Sudamérica, sino también en el balompié internacional. Además, con su selección, el “Apache”, como también es conocido, se ha ganado un lugar y se ha consolidado como un referente de la albiceleste.

Tévez
Foto de Twitter
Carlos Tévez

 

El presente que vive Tévez en la Juventus de Italia es sin lugar a dudas exitoso; sin embargo, no todo ha sido miel sobre hojuelas para el delantero a lo largo de su vida, sobre todo si nos remontamos a su infancia, ya que fue en esta etapa en donde experimentó los momentos más complicados.

 

En primer lugar, destaca el hecho de que a los seis meses de nacido fue abandonado por su madre y prácticamente quedó huérfano, considerando que su padre falleció en un tiroteo, aunque a final de cuentas fueron sus tíos quienes se encargaron del pequeño Carlos, criado en el barrio Ejército de los Andes, mejor conocido como Fuerte Apache, uno de los barrios más peligrosos de Argentina.

 

A los 10 meses vivió otro doloroso momento al caerle agua hirviendo en una parte de la cara y el cuello, lo que provocó que fuera nuevamente alejado de su familia al ser internado por un periodo de dos meses en el hospital, la consecuencia fue una notable cicatriz que hoy en día luce en la piel del futbolista.

 

Al nacer en uno de los barrios más peligrosos, Tévez era propenso a incurrir en el vandalismo o actos delictivos a su corta edad; sin embargo, a final de cuentas el balompié evitó que las cosas fueran de mal en peor para el “Apache”, pues él mismo acepta que si no fuera por el fútbol “yo hubiera terminado como muchos chicos de mi barrio. Estaría muerto o en la cárcel, o tirado en la calle por ahí, drogado”.

 

Por momentos como estos es aún más grande el reconocimiento para Carlos Tévez, pues una vez más queda demostrado que pese a la adversidad uno en la vida puede tomar decisiones, ya sea para ser delincuente o para convertirse en un futbolista de clase mundial y ser reconocido por todo tu país como el jugador del pueblo. 

 

También lee: Cristiano Ronaldo, de Portugal para el mundo

Comentarios de la nota