En un partido en el que ambos porteros fueron las figuras durante los 90 minutos, y en el que parecía ser un empate final, Pachuca terminó por resolver en los cinco minutos que el árbitro agregó y con ello lograr colarse en la Liguilla del Apertura 2014.
Veracruz llegó al Estadio Hidalgo como víctima, teniendo en el papel un plantel inferior, aunado a que ya estaba eliminado, pero Pachuca se encontró con unos Tiburones que tenían como principal virtud el orden defensivo, situación que le complicó la vida al equipo hidalguense, que no encontraba cómo hacer daño al rival, que de a poco empezó a sentirse cómodo en la cancha.
Esta comodidad se reflejó en remates a portería por parte de Veracruz, que obligaron al 'Conejo' Pérez a intervenir para impedir la caída de su marco, sin contar el disparo de Andrade que se estrelló en el travesaño al 34', mientras que por parte de los locales no se presentó ni una ocasión clara en la primera parte.
En el complemento el técnico de Veracruz, Carlos Reinoso, quien asumió el puesto luego de ser auxiliar, decidió arriesgar para ir a buscar el partido, ingresando a 'Keko' Villalba, aunque esto significara abrir el juego al dejar más espacios.
Rápidamente las ocasiones de gol llegaron y, Veracruz consiguió un gol al 54' con un remate de cabeza de Villalba pero fue invalidado por encontrarse en fuera de juego, seguida de la respuesta de Pachuca con un tiro libre de Ayoví que se estrelló en el travesaño y que no pudo contrarrematar Herrera.
La apertura en el juego existía, y se notaba ya que Pachuca comenzaba a tener más oportunidades de gol, mismas en las que Melitón sería fundamental para evitar los goles, con sendas atajadas al 61' y al 64' que lo ponían ya como el hombre más importante de su equipo.
Ya cuando parecía estar cantado el empate, en los cinco minutos que agregó el árbitro vino el gol de Avilés Hurtado para darle la calificación a Pachuca, y callar los abucheos que minutos antes había recibido, y vaya que tienen que agradecer, porque los Tuzos tienen Liguilla y, podrán competir por el título.
