Bea Boullosa es la nutrióloga de la Selección Mexicana de futbol. Es licenciada en Nutrición por la Universidad Iberoamericana, con Excelencia Académica. Además, está certificada por el Colegio Mexicano de Nutriólogos desde el 2003.
Bea es la responsable de que la selección mexicana tenga la energía necesaria para que pueda estar sobre el campo durante todo el partido. En entrevista con la revisa QUO, la nutrióloga explicó que la nutrición de un futbolista profesional inicia con el conocimiento profundo del metabolismo de los jugadores.
Explicó que lo primero que realiza es una "valoración antropométrica" para medir la cantidad de huesos, piel, grasa y músculo en el cuerpo del jugador.
Una vez determinadas estas variables, se calcula la cantidad de energía que requiere el jugador, que a su vez se transforma en instrucciones para el chef de la selección, quien preparará los alimentos. La nutrióloga explicó que lo que hace es traducir los requerimientos en porciones que proporcionen la energía suficiente.
Detalló también que es importante no descuidar la función cultural de la comida, por lo que siempre llevan a los viajes internacionales ingredientes como tortillas, frijoles y condimentos picantes para que los jugadores acepten con gusto el alimento.
Aproximadamente cuatro horas antes del partido los jugadores reciben su última comida sustancial. El objetivo es que los jugadores lleguen al partido con la cantidad justa de energía para gastar durante los 90 minutos. En general esta comida consiste de una porción de pasta o arroz (para proporcionar hidratos de carbono), un poco de pollo (proteína) y verduras (vitaminas y minerales).
El ingrediente prohibido desde hace tiempo es la carne, debido a que puede dejar rastros de clembuterol y salir positivo en las pruebas médicas que les realizan. Así que las proteínas animales vienen exclusivamente del pollo y pescado.
Ahora, no sólo se trata de nutrir al cuerpo; también hay que darle energía al cerebro por medio de glucosa. La glucosa ayuda a mantener el cerebro alerta y listo para planear y ejecutar las jugadas. Para ello la nutrióloga le da gomitas a los seleccionados durante el medio tiempo. Adicionalmente, durante el juego los jugadores son hidratados con bebidas isotónicas que contienen la cantidad necesaria de electrolitos disueltos que requieren para comensar lo utilizado en el partido,.
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