Javier Mascherano, te dicen el jefecito

Existe un grupo de jugadores que hace poco ruido, que su presencia es notoria sólo en los momentos de máxima presión y que sin ellos en el campo el equipo se viene abajo. Javier Mascherano, el crack sin reflector.

10-Jul-2014 QuimiNet Mundial Brasil 2014, El Color Mundial Brasil 2014, El Color
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Hoy me toca quitarme el sombrero, ponerme de pie y aplaudir tu entrega, sacrificio, garra, coraje, tesón, amor a la camiseta, compromiso total, conexión en el campo y un millones de cosas más que harían la lista más larga que la del supermercado un domingo de verano.
 
Eres un tipo serio, callado, entregado al juego, un crack con poco ruido, pero con unos galones que muchas estrellas quisieran tener.
 
Tu actuación en el campo frente a la selección de Países Bajos se puede definir como excelsa, el tipo más ubicado en la cancha, artífice de goles defensivos, de esos que no suben el marcador, pero que ayudan a la moral del equipo.
 
Nunca diste un balón por perdido, nunca renunciaste a tu idea de jugar a la pelota, rodeado de cavernícolas, a diferencia de Messi, te mantuviste ajeno a su rudimentaria manera de atacar la bola.
 
 
javier_mascherano_1Foto por EFE
Ni un golpe en la cabeza te hizo tirar la toalla, la visión de los vencidos no es para ti, en tu cuerpo sólo existe la idea de ganar, de competir leal y deslealmente, de ser el 5, el 10 y el 2 en caso de que tu equipo necesite que cubras esas y más posiciones.
 
Seguro Robben te soñará y cómo no hacerlo, le robaste la gloria de goles en dos ocasiones, siempre atento, siempre punzante.
 
Verte antes de los penales habla de tu valentía, mientras el que portaba la cinta de capitán bajaba la cabeza y tomaba aire después de jugar no sé qué partido, decidiste alzar la voz, golpear el pecho de tus compañeros, hablarles de tranquilidad, de mente fría, de hazañas y sueños de gloria.
 
Técnico en el campo, amigo en el vestidor, guerrero cuando te pones la albiceleste y tienes que dar más allá de las limitaciones propias de tu cuerpo y técnica.
 
Si a alguien se le debe que Argentina patee la pelota el domingo en Río es a ti, tú no necesitas el reflector de otro porque tienes los focos y un par bien puesto para alzar la mano y decirle al mundo, el “JEFE” está en el campo.
 

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