España se va a casa con el orgullo “entre las patas”

Ambas escuadras se encontraban ya eliminadas y jugaron este partido con la esperanza de no terminar últimas del grupo y regalar una alegría a sus aficionados que al escuchar el pitido final regresarán a sus hogares buscando olvidar tierras brasileñas.

VEM - Partidos - 35
 
El día de hoy en la Arena da Baixada de Curitiba las selecciones nacionales de Australia y España jugaron su último partido de la Copa del Mundo Brasil 2014.
 
Ambas escuadras se encontraban ya eliminadas y jugaron este partido con la esperanza de no terminar últimas del grupo y regalar una alegría a sus aficionados que al escuchar el pitido final regresarán a sus hogares buscando olvidar tierras brasileñas.
 
El campeón del mundo dimitió hoy y saltó a la cancha con un cuadro distinto al que jugó los dos primeros encuentros del Mundial.
 
 
Por su parte Australia mandó a la cancha lo mejor que tiene, menos a Cahill que se perdió el partido por doble amarilla, para buscar hundir más el barco de los dirigidos por “papá pitufo” Vicente del Bosque.
 
Un ambiente hostil enfrentaba la aún campeona del mundo, el estadio ataviado con camisetas amarillas les dejaba en claro que no eran bien recibidos y aunque no jugara ningún equipo americano el apoyo era total con los Soocceros.
 
España
Foto por EFE
 
El parado táctico de España buscaba tener mayor poder ofensivo, pero los primeros cinco minutos fueron de controlados por el equipo de Australia.
 
La tuvo el Guaje pero terminó en la decimosexta fila del estadio
 
La primer oportunidad clara de gol la tuvo España en los botines de David Villa al minuto 20:12. El asturiano recibió el balón en el segundo poste, el balón que envió Santi Cazorla le llegó sólo al Guaje quien estaba en fuera de lugar, pero su remate salió muy desviado evitando un error arbitral más en esta copa del mundo.
 
Si bien al partido lo acompañaban pocas emociones, por lo menos la escuadra ibérica mostraba una mejor cara que en los partidos anteriores de esta justa mundialista.
 
La selección española se empezó a hacer con el balón y colocaba a sus ofensores de frente a la portería de Mathew Ryan, sin embargo, cuando los jugadores españoles querían probar a puerta la defensa de australiana regresaba bien y tapaba las oportunidades. Que se volvían más constantes pero sin real peligro para verse abajo en el marcador.
 
Al partido en sus primeros sus primeros 30 minutos no le pasaba nada, no había ocasiones de gol, velocidad, toque ni siquiera juego brusco que mostrara algo de hambre por parte de las dos escuadras.
 
La roja quería pero no podía, los Soocceros no querían ni podían ponerse frente a la meta de Pepe Reina. La triste realidad del encuentro la demostraba España que en los tiros de esquina intentaban realizar jugadas prefabricadas que terminaban en los pies de su portero.
 
¡¡Viva Villa Maravilla!!
 
Al minuto 34:10 el máximo goleador de la roja levanta la mano y dijo presente. Una jugada que inicia Koke en el centro del campo, el mediocentro colchonero ve abierto a Juanfran, el volante del Atleti llega a línea final y manda una diagonal matona al Guaje quien empuja el balón con el taco al fondo de la red para marcar su sexto gol en las Copas el Mundo, su primero en Brasil 2014 y el que pone a la roja adelante en este partido.
 
La alegría del gol se pudo ir al traste en tan sólo dos minutos. Las fallas de comunicación entre Ramos y Albiol dejaron un balón en el área chica que Oar casi caza, pero Pepe Reina se revolvió con los pies para sacar la esférica de su área. Los problemas del equipo español no paró en su cuadro bajó, la ausencia de Puyol se nota desde la Eurocopa del 2012.
 
El árbitro central Nawaf Shukralla agregó un minuto a la primera parte que terminó con la victoria parcial de España un gol por cero.
 
El segundo tiempo mostró la cara agradable del equipo australiano, al minuto 48 Leckie mandó un centro peligroso que había tomado mal ubicado al arquero Reina y a Raúl Albiol, pero Sergio Ramos alcanzó a despejar la pelota. Luego de este susto el equipo español regresó al “tiki taka”, manejar el balón y buscar que el equipo rival fuera por la pelota dejando espacios en medio campo y el cuadro bajo.
 
España empezó a perder control en el medio campo y Vicente del Bosque volvió a sorprender a todos mandando a Villa a la banca, mientras que su lugar fue ocupado por Juan Mata. Apostaron por el manejo del balón y que Fernando recuperara un poco de confianza de frente al marco, sin embargo, el movimiento también buscaba defender el gol conseguido en el primer tiempo en lugar de ir por más.
 
El encuentro cayó en la tónica que quería España, mucho toque, mucho pase corto, movilidad y triángulos en el campo, sin embargo no tenía referente al ataque y los cambios que buscaba del Bosque no tenían ni pies ni cabeza. Al 63:45 cayó el segundo de España.
 
El Niño encuentra puerta y Don Andrés demuestra hambre.
 
Al minuto 69 Fernando Torres recibió un balón sólo por la izquierda del área grande que Don Andrés Iniesta le filtró, el "niño" encaró y Ryan y de manera sutil le colocó el balón al lado del guante izquierdo. España conseguía el segundo que fue poco celebrado, pero que daba tranquilidad al equipo para seguir jugando como Luis Aragonés les enseñara hace ocho años.
 
España era dueño y señor del partido, el “tiki taka” en el campo, pero sin pegada ni hambre de cara a puerta. Las contras eran el gran problema que presentaba, la falta de sincronización entre los centrales españoles daban sensación de peligro en medio campo, sin embargo el equipo australiano no lograba controlar bien el balón para encarar a Pepe Reina.
 
España
Foto por EFE
El partido transcurría, Australia no encontraba posición de disparo y el equipo español se sentía cómodo con la pelota. Los que vestían de negro mostraban ganas y determinación que terminaron capitalizando al minuto 81 con un gol de Mata.
 
Tres a cero, los goles de España se encontraban en la banca
 
Al minuto 81:29 Francés Fàbregas mandó un cambio de juego preciso a los pies de Juan Mata que entraba sólo por el corredor derecho del equipo australiano. El jugador del Manchester United avanzó con el balón controlado unos pasos y mandó la pelota por ente las piernas del arquero Ryan, quien no pudo detener la pelota y ésta terminó por tercera vez en el fondo de las redes.
 
Australia presentó su cara más débil en el partido en que se jugaba el orgullo, España sin dar un gran espectáculo encontró en la banca los goles que necesitó en la Copa del Mundo.
 
Tres minutos de agregado que sirvieron para que el equipo ibérico controlara el balón y se fuera a casa con una victoria que sabe a muy poco, pero ayuda a recuperar la moral de unos jugadores que demostraron más hambre que los llamados titulares.

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