El exatleta mexicano Noé Hernández, plata en 20 kilómetros de los Juegos Olímpicos de Sydney 2000, ha superado la condición de gravedad cinco días después ser herido de bala en la cabeza y perder su ojo izquierdo, informaron hoy sus médicos.
Hernández, de 34 años, ha pasado de un estado grave a uno delicado, se encuentra en terapia intensiva y con posibilidad de ser dado de alta en unos diez días, indicó Carlos Castillo Rangel, el médico a cargo desde que fue hospitalizado el 29 de diciembre.
El exatleta fue herido de bala en la cabeza en un bar de la zona metropolitana de Ciudad de México que le causó la pérdida del ojo izquierdo y severas afectaciones en el derecho, aunque a la fecha presenta avances en su salud, explicó el galeno.
El subcampeón olímpico de Sydney presenta una visión mínima en derecho y todavía no se ha descartado la posibilidad de que pierda totalmente la vista, según el parte divulgado hoy a la prensa mexicana.
Hernández presenta "avances favorables, cuestiones que favorecen su salud", apuntó Castillo al señalar que se alimenta por sí mismo, ha caminado unos pasos y se han descartado complicaciones renales y pulmonares que puedan poner en riesgo su vida.
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