Del Maracanazo al Mineirãzo

Aquella derrota sufrida el 16 de julio de 1950 duele y aún sangra en la Canarinha, el nuevo golpe histórico propinado por Alemania el 8 de julio de 2014 perseguirá a esta generación.

09-Jul-2014 QuimiNet Mundial Brasil 2014, El Color Mundial Brasil 2014, El Color
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Hasta el pasado 8 de julio sólo un hombre había muerto dos veces. Moacir Barbosa, arquero del Scratch que perdió la Final de 1950ostentaba el negro título de haber muerto el 16 de julio de 1950 y 50 dolorosos años después, para ser exacto el 8 de abril de 2000, murió a causa de un derrame cerebral pero en parte se debió al odio general de la sociedad brasileña.
 
 
El 8 de julio de 2014, 23 jugadores y 6 hombres de pantalón largo han sustituido al defenestrado arquero para entrar en el odio colectivo y ser responsables de la mayor derrota en la historia de la Selección Brasileña de Fútbol.
 
Esta derrota tiene muchos padres. De nada sirvió implorar al espíritu de Neymar Jr. cuando en el campo 15 muertos daban lástima en el campo de la ciudad de Belo Horizonte.
 
¿Qué derrota es peor?
 
Los puristas dirán que el Maracanazo en la Final del 50 es, sin lugar a dudas, el mayor dolor cometido contra el fútbol brasileño.
 
200 mil almas reunidas en el estadio Maracaná se prepararon para ver como 11 uruguayos morían en el cadalso para 90 minutos después ser testigos de la mayor muestra de amor propio y entrega valerosa por parte de 11 tipos que retaron a la muerte y le ganaron.
 
Esa noche más de 100 suicidios se registraron alrededor de todo el país, millones de personas sufrieron y una leyenda nació Três Corações viendo a su padre llorar.
 
El Mineirãzo tiene un mayor impacto social, mediático y económico.
 
A diferencia de 50 millones de seres humanos en todo el globo terráqueo fueron testigos de la vejación que sufrió el equipo de Scolari a manos de Müller, Kroos y compañía.
 
Este equipo vestido de verde-amarela sin alma en sus cuerpos es el responsable de la mayor derrota en la historia de la canarinha, carga en su espalda la peor derrota de un equipo en un Mundial y la mayor diferencia de goles que se ha presentado en esta instancia en una Copa del Mundo.
 
Contexto Social
 
En el aspecto social lo del Maracanazo fue un golpe único y certero, no había más fiesta y al día siguiente del partido sólo quedaban los brasileños y su dolor.
 
Hoy es distinto, el pueblo gobernado por Dilma Rousseff aún tiene que mostrar la cara, pues sobran días de competición mundialista y tienen que jugar el partido que nadie quiere, el que disputan los perdedores de las semifinales.
 
camionesFoto por EFE
Camiones incendiados, violencia en cada Fan Fest desde Roraima hasta Río Grande del Sur y mucho descontento social.
 
El peor escenario posible, una sociedad convulsionada por el descontento político, económico, laboral, sanitario y sexual deja de ver los televisores para salir a la calle y cabrearse ante todos estos males y la derrota de su equipo en su Mundial.
 
Los millones de infiernitos que se incendiaron, con los que venían ocurriendo y nadie televisaba, son la realidad actual de Brasil, se ha juntado el hambre con las ganas de comer.
 
 
Los parias brasileños
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Foto por EFE
La oncena que saltó al campo el 16 de julio fue Moaçir (P), Augusto, Juvenal Amarijo, Bauer, Danilo, Bigode, Friaça, Zizinho, Ademir, Jair y Chico, de esos hombres sólo uno fue paria el resto de su vida.
 
El cuadro titular del 8 de julio fue Júlio César (P), Maicon, Dante, David Luiz, Marcelo, Fernandinho, Luiz Gustavo, Hulk, Óscar, Bernard y Fred, 11 hombres que si la justicia actúa como hace 64 años deberán ser nuevos parias, apestados y un grupo de olvidados.
 
Si hubiese ganado Brasil nadie recordaría ninguna de estas fechas. Lo normal no se recuerda casi nunca.

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