Dos años después de que se realizara la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014 y en un mar de manifestaciones políticas y sociales, Río de Janeiro se prepara para el mítico encendido del pebetero en la ceremonia de apertura de los XXXI Juegos Olímpicos de Verano.
Aún con la incógnita de quién será el encargado de encender el Fuego Olímpico en el Estadio de Maracaná, Brasil se prepara hospedar para las dos semanas más importantes del deporte en todo el mundo.
Por primera vez un país sudamericano será sede de los Juegos Olímpicos y lo hará en medio de manifestaciones, problemas de salud con el virus de Zika, pobresa y problemas políticos en donde la presidenta suspendida Dilma Rousseff no podrá participar, siendo el presidente interino Michel Temer el representante del gobierno brasileño quien asista al magno evento.
Luego de que la Antorcha Olímpica registrara un retraso debido a las manifestaciones en su trayecto final entre Copacapana y el Estadio de Maracaná, aún se desconoce si podrá ser Edson Arantes do Nascimento, mejor conocido como Pelé, el encargado de encender el pebetero olímpico debido a problemas musculares y en su cadera.
Sin embargo, se espera que estos juegos recobren la esperanza de un pueblo urgido de justicia, paz y esperanza, buscando inspiración y coraje en el esfuerzo que los más de 10 mil atletas que participaran en 306 eventos y 28 deportes.
Figuras como Usain Bolt, Michael Phelps, Serena Williams, Novak Djokovic y Neymar, junto a la Delegación Estadounidense, serán los encargados de recibir los reflectores mientras buscan hacer válidos los pronósticos de favoritos a colgarse las medallas áureas.
Atrás quedaron los problemas del doping en el equipo atlético Ruso que impedirá a cerca del 25% de su congregación participar, incluyendo a la multimedallista Yelena Isimbáyeva, o las ausencias de Roger Federer y otros más, ahora todo el fiesta, todo el brillo, todo es esfuerzo, todo es deporte, y eso hay que festejarlo.
Los Juegos Olímpicos se realizarán en Brasil hasta el domingo 21 de agosto.
